Enabling sister Ines Gallardo to develop the pastoral role in the church "New way",
thus confirming a clear call of the Lord to fulfill this task.
La iglesia NUEVO CAMINAR situada en Maracay, Estado de Aragua, Venezuela, vivió una experiencia espiritual trascendente. La hermana Inés Gallardo, quien estuvo a cargo de la iglesia desde febrero del año en curso, fue habilitada para desarrollar la función pastoral en dicha congregación. Esta habilitación, confirmó un claro llamado del Señor.
Fue el viernes 14 de octubre cuando se llevó a cabo el acto de encomendación, el cual estuvo a cargo de los integrantes del Ministerio Generación en Conquista. A tal convocatoria asistieron, además de los miembros de la congregación NUEVO CAMINAR, varios pastores que sirven al Señor en la zona y hermanos de otras iglesias.
En un ambiente de júbilo, agradecimiento al Señor y comunión, los integrantes del Ministerio compartieron el tema CÓMO SE ESTABLECEN AUTORIDADES EN LA IGLESIA, haciendo referencia a las prácticas más habituales que se han desarrollado hasta el presente para hacer dicha designación, mostrando luego por la Palabra, cuál es el modelo de Dios, partiendo de la constitución hecha por Jesucristo de cinco ministerios como son apóstoles, profetas, evangelistas, pastores y maestros. Otro de los temas que se abordó fue el de PRESBITERIO E IMPOSICIÓN DE MANOS, explicándose la importancia de ambas acciones al momento de confirmar de parte de Dios a una persona en el llamado que el Señor le encargó desarrollar. Posteriormente, los hermanos que forman parte del Ministerio Generación en Conquista oraron por la hermana Inés con imposición de manos, habilitándola para ejercer la función pastoral. Este momento de ministración sirvió también para hacer público que tanto la hermana Inés como la iglesia NUEVO CAMINAR continúan bajo la autoridad espiritual del Ministerio Generación en Conquista, en una relación de pacto.
Finalizado este acto, hubo un momento muy emotivo y fue cuando los miembros de la iglesia abrazaron a la pastora Inés, manifestándole su amor en el Señor.
El sábado 15 la iglesia fue nuevamente convocada. La ministración de la Palabra estuvo a cargo de los integrantes del Ministerio. El tema fue RELACIÓN ENTRE HUMILDAD Y FORMACIÓN, poniéndose de manifiesto lo que en muchas ocasiones sucede con los hijos de Dios que leen diariamente la Palabra, oran al Señor, se congregan, reciben enseñanza, concurren a seminarios o congresos, reciben consejería y aún así, sus vidas no están progresando espiritualmente de manera proporcional a todo lo que reciben. ¿Dónde está el problema, cuál es el estorbo que impide dicho crecimiento espiritual?
Se estableció claramente por la Palabra que existe una gran diferencia entre formación y discipulado, aunque a veces se ha creído que la formación de Cristo en el creyente depende de la acumulación de conocimiento bíblico. Pablo, dirigido por el Espíritu escribió estas palabras: "Hijitos míos, por quienes vuelvo a sufrir dolores de parto, hasta que Cristo sea formado en vosotros" (Gálatas 4:19). La formación de Cristo en el creyente va más allá del conocimiento bíblico.
Los expositores mostraron cómo la formación de Cristo en cada hijo de Dios puede ser una realidad tomando como base Santiago 1:22-23, explicando que la palabra implantada se debe recibir, lo que demanda una actitud de humildad, así como cuando la virgen María recibió la palabra de su embarazo no para que su mente fuera iluminada por la revelación, sino recibiéndola con humildad para quedar embarazada y dar fruto. La humildad es la "llave" que abre la puerta para que la revelación dé el fruto que corresponde.
Los hermanos que impartieron la Palabra hicieron énfasis en que si bien es cierto el evangelio es poder de Dios y ésta es una verdad innegable, para que el poder contenido en el evangelio se manifieste en plenitud, es imprescindible que la persona de Cristo sea formada en aquellos que han creído y predican el evangelio.
Y llegó el final. El domingo 16 ante un auditorio expectante
por recibir la palabra del Señor, el hermano Daniel Cipolla abordó el tema TIEMPO DE CONOCER TU DESTINO.
Señaló las diferencias existentes entre ser un instrumento
útil para el Señor y ser usado. También la diferencia entre ungido y unción.
Comentó que habitualmente los creyentes oran diciendo: “Señor úsame”, cuando en realidad lo que cada hijo de Dios debe tener como objetivo es ser un instrumento útil en las manos del Señor. Cuando esto sucede, entonces la labor encomendada por el Señor a “su” instrumento, resulta efectiva porque está encuadrada en la voluntad de Dios.
Los asistentes a cada una de las reuniones pudieron experimentar y certificar de corazón que durante los tres días de comunión, la gloria del Señor se manifestó, que Jesucristo fue el centro de cada una de las actividades y en todo se nombre fue exaltado. El pueblo del Señor allí reunido pudo experimentar nuevamente el privilegio de lo que significa disfrutar del derecho de ser hijos de Dios y ciudadanos de un Reino inconmovible.
“…al único que tiene inmortalidad, que habita en luz inaccesible; a quien ninguno de los hombres ha visto ni puede ver, al cual sea la honra y el imperio sempiterno. Amén” (1ª Timoteo 6:16).
mientras integrantes del Ministerio oraban con imposición de manos.