Del 11 al 13 de julio de 2008, los apóstoles Daniel y Estela Dardano ministraron en la Obra del Señor en el Puerto de Veracruz. Las actividades tuvieron lugar en el Hotel Angeles Suites de Col. Ricardo Flores Magón, Veracruz, México. Con el lema VERACRUZ RESPLANDECE, el objetivo fue impartir por el Espíritu todo aquello que contribuyese al perfeccionamiento de los santos, reafirmando la obra comenzada en septiembre de 2001, año en el que un trascendente evento espiritual marcó un hito en la historia del continente americano.

El 22 de abril de 1519 desembarcó en los médanos de San Juan de Ulua el conquistador Hernán Cortés, con intenciones de poseer territorio y establecer el dominio español. La fecha del desembarco coincidió con el viernes de semana santa. Uno de los objetivos de Cortés fue fundar una villa que llevara el nombre de Villa Rica Vera-Cruz. Ese afán lo impulsó a la conquista no sólo de territorios sino de mentes y voluntades humanas. El objetivo de conquista se logró en 1521 y desde ese momento la ceguera espiritual, la opresión y esclavitud en el alma sumieron a México en una aberrante idolatría y en múltiples prácticas de ocultismo.

A pesar del estado en el que se encontraba la gente, Dios tenía prevista la liberación de México; liberación que se extendería a América Latina.
En septiembre del año 2001 el profeta Daniel Cipolla recibió una palabra del Señor con relación a la liberación de México desde el mismo lugar donde había sido conquistado: el golfo de Veracruz. Se debía buscar del Señor una estrategia en oración para llevar a cabo esta empresa. Inmediatamente los integrantes del equipo ministerial Generación en Conquista y un  grupo de intercesores del Estado de México y del Estado de Veracruz, se dieron a la tarea de orar y esperar del Señor el plan.
Cuando la estrategia se recibió y el plan tuvo forma, se materializó llevándose a cabo los días 18 y 19 de febrero de 2002. El grupo conformado por los integrantes del Ministerio apostólico-profético Generación en Conquista, matrimonios de pastores bajo la autoridad del Ministerio y varios intercesores, se reunió en la ciudad de Veracruz con el propósito de llevar a cabo “la toma y reconquista espiritual de México a partir del Golfo de Veracruz”.

Diversos actos y declaraciones proféticas tuvieron lugar dentro de las aguas del golfo de México, en la playa y en tres lugares específicos de la ciudad. Estos lugares representan a las tres áreas que constituyen al ser humano: espíritu, alma y cuerpo. El propósito de visitar dichos centros y realizar declaraciones de parte del Señor fue cancelar maldiciones y esclavitud del pasado, produciendo liberación espiritual de las personas por el poder liberador del Espíritu.

Uno de los actos de gran trascendencia espiritual fue cuando en la playa, Hernán Cipolla en representación de Hernán Cortés y los conquistadores españoles, pidió perdón a Leticia (su esposa), quién en ese momento representaba a la nación mexicana, por el abuso y atropello que la conquista había traído. El perdón fue concedido y el intercambio de anillos entre ellos, simbolizó el sello de un pacto de santidad y libertad.

La síntesis de lo que se dio en llamar “la toma del golfo” se registró como una señal histórica de lo que el Señor había hablado y se estaba llevando a cabo en esos momentos. Todos los participantes, dentro del mar y distribuidos en siete botes, arrojaron varias piedras, donde además de escribir versículos de la Palabra en una cara de las mismas, del otro lado se podía leer lo siguiente: HOY SE ABRE LA PUERTA ESPIRITUAL EN LA CONQUISTA DE MÉXICO Y LATINOAMÉRICA PARA JESUCRISTO.

Desde el año 2002 en el que se confirmó la liberación espiritual desde el golfo de Veracruz y para América Latina, hubo incesante oración al Señor para que en el puerto de Veracruz, en la misma ciudad, pudiera comenzar un poderoso testimonio de Jesucristo y su evangelio. Los años pasaron hasta que llegó el tiempo que los integrantes del Ministerio, tuvieron dirección de parte del Señor que era el momento propicio para trabajar en una estrategia de alcance evangelístico y abrir una obra en el puerto. Esta tarea les fue delegada en el año 2007 a Julio y Amparo Cabrera, pastores de la Iglesia Generación en Conquista Poza Rica, a quienes se unió un grupo de trabajo, que empezó a evangelizar anunciando el poderoso mensaje del evangelio del Reino. 

El tiempo transcurrió, la semilla sembrada dio su fruto y el 17 de febrero de 2008, se realizaba la primera reunión conjunta del grupo conformado por 40 personas aproximadamente. Los encargados de la obra son los hermanos Antonio y Juanita Vazquez y Lorena Peralta, miembros de la iglesia Generación en Conquista Poza Rica, quienes trabajan con la supervisión de los pastores Cabrera. Durante estos meses el grupo se fue consolidando, recibiendo diferentes enseñanzas de la Palabra, que los está llevando a crecer en la gracia y conocimiento del Señor Jesucristo.
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Los hermanos Daniel y Estela Dardano viajaron a Veracruz para conocer al grupo de hermanos, e impartir por el Espíritu todo aquello que contribuyese al perfeccionamiento de los santos. Esta visita se realizó entre los días 11 al 13 de julio. Con el lema VERACRUZ RESPLANDECE, cada noche los reunidos en un salón del Hotel Ángeles, recibían la impartición de la Palabra y el espíritu. El poder de Dios se hizo palpable en diferentes formas, desde sanidad física y emocional, hasta un profundo quebrantamiento espiritual con el propósito de que las vidas se alinearan de acuerdo al orden de Dios. Cada noche, la asistencia aumentaba en número y la última noche el salón se completó a su máxima capacidad. Es de destacar que hubo hermanos visitantes de otras congregaciones como así también pastores de la zona. Los momentos de mayor alegría de los cristianos reunidos, era ver como en cada reunión personas se rendían a Cristo, contabilizando un total de 20 personas aproximadamente en las tres noches.

Se pudo comprobar que la puerta espiritual está abierta, que toda la labor que se realizó en el año 2002, en la actualidad está rindiendo los frutos esperados. La obra sigue creciendo y ¡VERACRUZ RESPLANDECE! para la honra del Señor.