en público, por lo tanto no ha sido preparado y editado como un escrito formal.
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En el día de hoy, estamos dando esta Palabra por una indicación precisa que el Señor entregó a mi espíritu hace un tiempo atrás, no muy largo, y esto comenzó con un tema que es más largo y más profundo que lo que hoy vamos a tocar, que tiene ver con el Nuevo Pacto de Gracia en Cristo Jesús.
Nosotros sabemos que estamos en este Pacto de Gracia, pero muchas veces no hemos comprendido en nuestro espíritu, cómo es que funciona bajo este Nuevo Pacto de Gracia, la misericordia y la gracia del Señor. Prácticamente, hasta juntamos la misericordia y la gracia como si fueran términos sinónimos, y hablamos de ellos como si fueran iguales, pero realmente, la Escritura y sobre todo en el Nuevo Pacto, hace unas diferencias bien marcadas y claras acerca de la misericordia y la gracia, y repito, éste no va a ser mi tema en el día de hoy... ya en algún momento podremos tocar más profundamente esto.
Lo que el Señor me indicó para el día de hoy, tiene que ver con un aspecto particular que va estar relacionado con la gracia del Señor, y algo que debemos liberar y activar en la Iglesia del Señor de la gracia de Jesucristo. Para eso estamos reunidos hoy aquí.
Algo puntual y específico, que les puedo asegurar de parte del Señor que nos va a llevar de algo en lo que estamos a una cosa diferente en el Señor, y esto va ser por la fe, no va ser por algo que podamos hacer, sino por algo que el Señor hará en aquellos hijos que le están creyendo lo que Él está hablando a la Iglesia, lo que el Espíritu de Dios está hablando a la Iglesia.
Cuando nosotros hablamos de la gracia, si la tenemos que sintetizar, tenemos que decir que la gracia es ese regalo, ese favor gratuito de Dios, que nosotros recibimos sin merecerlo. Nadie merece la gracia de Dios, la gracia es algo que usted no puede pagar y es algo que usted no puede hacer nada por recibirla, es algo que viene directamente de Dios, que es parte de su voluntad y que uno recibe sin tener que ver con ninguna clase de merecimiento para recibir esa gracia, ese favor, ese regalo de Dios.
Hay una definición muy bonita de gracia que dice que es, la influencia divina sobre el corazón y su reflejo en la vida.
Quiere decir, que la gracia es una cualidad especial que Dios pone sobre sus hijos, pero esa cualidad está sobre sus hijos para que sea manifestada en la vida cotidiana.
Hoy de lo que vamos a hablar con claridad, es de lo que significa la gracia cotidiana.
No estoy hablando de la gracia del Señor relacionada con el perdón de los pecados, ni la gracia del Señor relacionada con los dones del Espíritu, ni la gracia del Señor relacionada con que Él nos entregó ministerios. Todas esas son cosas de la gracia del Señor. No, hoy vamos a hablar específicamente, de cómo vamos a activar y liberar la gracia del Señor como Iglesia en la vida cotidiana, en todas las áreas y en todos los aspectos.
Hay una diferencia fundamental que debemos entender como base, entre la misericordia y la gracia, porque debemos comprender en nuestro espíritu, que mientras la misericordia es algo pasivo, la gracia es algo activo; y voy a explicarme ¿qué estoy queriendo decir con esto?
Muchas veces no entendemos bien cómo funcionan ambas y pensamos que ambas, misericordia y gracia, funcionan casi de la misma manera, pero en realidad, la misericordia de Dios, cuando Dios tiene misericordia de nosotros y tuvo misericordia, esa misericordia lo que hizo fue, que Dios en Cristo Jesús nos libró de un castigo que merecíamos. Mientras que la gracia es recibir un regalo que no merecíamos.
En resumen, la misericordia me libra de lo que merezco y la gracia me da lo que no merezco, ¿es igual? Por supuesto que no. Escuche bien, cuando usted estaba perdido en el pecado sin Cristo, sin esperanza, cuándo le predicaron el evangelio de Jesucristo, cuando usted llegó a Él y se arrepintió de sus pecados por su misericordia, el Señor le quitó sobre usted el juicio que usted merecía del infierno, del castigo eterno y en su misericordia Él le libró de ese castigo que no merecía.
Ese es un acto que vino sobre usted y en ese acto que vino sobre usted, usted es completamente pasivo y yo soy completamente pasivo, fue algo que simplemente recibí. ¿Puedo hacer algo más después de esa misericordia? Nada más. Sencillamente, la tengo que recibir y agradecer a Dios que me libró de ese castigo justo que yo merecía.
Pero la gracia no es igual, porque la gracia viene a nosotros como un regalo gratuito de Dios, como es la persona de Cristo, y como es la salvación. Pero cuando entramos al Pacto de Gracia, toda la Palabra de Dios nos insta y nos exhorta, ¿a qué? A vivir agradando al Señor en todo.
¿Qué quiere decir, entonces? Que la gracia ha sido un don que me dio el poder, que me concedió la virtud de vivir como un hijo de Dios, de vivir como alguien santo en la Tierra, me dio el poder de que yo pueda caminar diferente de lo que caminaba, es decir, la gracia me ha sido dada porque exige algo de mí, exige una actitud activa, no es como la misericordia que no requiere de mí nada activo, sólo pasivo.
La gracia de Dios requiere algo activo, y el Espíritu Santo lo que me habló es:
Mi Iglesia necesita aprender a activar la gracia que le he dado, pero no para sus cultos, no para predicar simplemente el evangelio, no para entender que son salvos, no para entender que son llenos del Espíritu Santo, no para los dones espirituales, no para los dones ministeriales, la necesita entender para activarla en la vida cotidiana a un nivel diferente de lo que está viviendo, y mucho más en estos últimos tiempos donde muchas cosas van a oprimir al pueblo de Dios.
Por eso, estamos esta noche reunidos en este lugar, ¡cómo no vamos a estar agradecidos! ¡Cómo no estar agradecidos, si Dios es tan bueno con nosotros! Que nos está enseñando cómo poder liberar lo que Él nos ha entregado.
Para hablar de esto, y para hablar con mucha sencillez esta noche y poder comprender en nuestro espíritu lo que significa esta gracia cotidiana, quiero referirme a una mujer que no era judía, era extranjera, era de una tierra llamada Moab y el nombre de ésta mujer era Rut.
Rut nos va a mostrar, cómo es que la gracia activa se libera de manera diaria y cotidiana; y lo precioso de Rut, es que ella nos lo va enseñar a través del Espíritu Santo, a través de su ejemplo cuando ella estaba en una condición completamente de pobreza, de dificultad, y de ese lugar el Señor la levantó porque ella aprendió, aún sin saberlo, a activar la gracia de Dios para su vida.
En Rut capítulo 1 verso 16, yo quiero detenerme en algo que la Palabra de Dios dice allí:
"Respondió Rut:
Y dijo:
No me ruegues que te deje, y me aparte de ti;
porque a dondequiera que tú fueres, iré yo,
y dondequiera que vivieres, viviré.
Tu pueblo será mi pueblo, y tu Dios mi Dios."
Rut 1:16
En ese momento Rut, sin saberlo, llamó sobre sí misma a la gracia de Dios. Esta mujer que era extranjera se podía haber vuelto a su tierra y a sus dioses, pero ella dijo, esto no va a ser así, yo no estoy contigo porque tengo interés en que algún otro marido me tome, no estoy contigo por eso, yo he conocido que el Dios que tú tienes es el Dios verdadero, no estoy interesada en volver a mis dioses.
Por lo tanto, aunque soy extranjera yo voy, yo he elegido que tu pueblo será mi pueblo y que tu Dios será mí Dios. Desde ese mismo momento la gracia de Dios empezó a activar de una manera sobrenatural sobre la vida de Rut y ella todavía no lo sabía, ni lo entendía. A diferencia de Orfa, que tomó su camino y dijo, me vuelvo a mi tierra, me vuelvo a mis dioses, Rut tuvo un espíritu diferente y dijo, eso no va a suceder de esa manera.
Por eso, quiero que, por favor, leamos Rut capítulo 2, voy a leer el capítulo completo de Rut 2, porque en este capítulo nos vamos a basar para lo que Dios nos va a mostrar acerca de, cómo liberar la gracia cotidiana en nuestras vidas. Yo lo voy a leer en la Nueva Biblia Latinoamericana de Hoy, en esa versión yo voy a leer Rut capítulo 2, que dice así:
"Noemí tenía un pariente de su marido, un hombre de mucha riqueza,
de la familia de Elimelec, el cual se llamaba Booz.
Y Rut la Moabita dijo a Noemí:
“Te ruego que me dejes ir al campo a recoger espigas
en pos de aquél a cuyos ojos halle gracia.”
Ella le respondió: “Ve, hija mía.”
Partió, pues, y espigó en el campo en pos de los segadores;
y fue a la parte del campo que pertenecía a Booz, que era de la familia de Elimelec.
En ese momento vino Booz de Belén (Casa del Pan),
y dijo a los segadores: “El Señor sea con ustedes.”
“Que el Señor te bendiga,” le respondieron ellos.
Entonces Booz dijo a su siervo que estaba a cargo de los segadores:
“¿De quién es esta joven?”
Y el siervo a cargo de los segadores respondió:
“Es la joven Moabita que volvió con Noemí de la tierra de Moab.
Y ella me dijo: ‘Te ruego que me dejes espigar
y recoger tras los segadores entre las gavillas.’
Y vino y ha permanecido desde la mañana hasta ahora;
sólo se ha sentado en la casa por un momento.”
Entonces Booz dijo a Rut:
“Oye, hija mía. No vayas a espigar a otro campo;
tampoco pases de aquí, sino quédate con mis criadas.
Fíjate en el campo donde ellas siegan y síguelas,
pues he ordenado a los siervos que no te molesten.
Cuando tengas sed, ve a las vasijas y bebe del agua que sacan los siervos.”
Ella bajó su rostro, se postró en tierra y le dijo:
“¿Por qué he hallado gracia ante sus ojos para que se fije en mí,
siendo yo extranjera?”
Booz le respondió:
“Todo lo que has hecho por tu suegra después de la muerte de tu esposo
me ha sido informado en detalle,
y cómo dejaste a tu padre, a tu madre y tu tierra natal,
y viniste a un pueblo que antes no conocías.
Que el Señor recompense tu obra y que tu pago sea completo de parte del Señor,
Dios de Israel, bajo cuyas alas has venido a refugiarte.”
Entonces ella dijo:
“Señor mío, he hallado gracia ante sus ojos,
porque me ha consolado y en verdad ha hablado con bondad a su sierva,
aunque yo no soy ni como una de sus criadas.”
A la hora de comer Booz le dijo a Rut:
“Ven acá para que comas del pan y mojes tu pedazo de pan en el vinagre."
Así pues ella se sentó junto a los segadores.
Booz le sirvió grano tostado, y ella comió hasta saciarse y aún le sobró.
Cuando ella se levantó para espigar, Booz ordenó a sus siervos y les dijo:
“Déjenla espigar aun entre las gavillas y no la avergüencen.
También sacarán a propósito para ella un poco de grano de los manojos
y lo dejarán para que ella lo recoja. No la reprendan.”
Rut espigó en el campo hasta el anochecer,
y desgranó lo que había espigado, y fue como 22 litros de cebada.
Ella lo tomó y fue a la ciudad, y su suegra vio lo que había recogido.
Rut sacó también lo que le había sobrado después de haberse saciado
y se lo dio a Noemí.Entonces su suegra le dijo:
“¿Dónde espigaste y dónde trabajaste hoy?
Bendito sea aquél que se fijó en ti.”
Y ella informó a su suegra con quién había trabajado, y dijo:
“El hombre con quien trabajé hoy se llama Booz.”
Noemí dijo a su nuera:
“Sea él bendito del Señor, porque no ha rehusado su bondad
ni a los vivos ni a los muertos.”
Le dijo también Noemí:
“El hombre es nuestro pariente; es uno de nuestros parientes más cercanos.”
Entonces Rut la Moabita dijo:
“Además, él me dijo:
‘Debes estar cerca de mis siervos hasta que hayan terminado toda mi cosecha.’”
Noemí dijo a Rut su nuera:
“Es bueno, hija mía, que salgas con sus criadas,
no sea que en otro campo te maltraten.”
Y Rut se quedó cerca de las criadas de Booz
espigando hasta que se acabó la cosecha de cebada y de trigo.
Y ella vivía con su suegra."
Rut 2: 1-23 Nueva Biblia Latinoamericana de Hoy (NBLH)
¿No me diga que no es extraordinaria la historia? Extraordinaria, uno quisiera seguirse leyendo lo que sigue, ¿no? Pero vamos a detenernos y era importante leer el capítulo para entender la parte central de la historia y de lo que el Espíritu Santo nos va hablar, a través de esta maravillosa historia.
Primero, cuando nosotros vamos leyendo este historia, nos damos cuenta que cuando Rut decidió y dijo, ante Noemí y ante la presencia de Dios, tu pueblo será mi pueblo, tu Dios será mi Dios, ella activó la gracia del Señor sobre su vida. Inmediatamente, después de eso la gracia divina comenzó a operar y manifestarse en ella.
¿Por qué digo esto? Porque hoy vamos a ver en este capítulo por el Espíritu, siete puntos. Habría más, pero vamos a ver siete puntos importantes, de cómo actúa la gracia cotidiana en la vida de los hijos de Dios. Lo primero:
1. La Gracia certifica que eres bendito en cualquier circunstancia.
Repito, en este pasaje se muestra que, la gracia certifica que eres bendito en cualquier circunstancia.
¿Por qué estoy diciendo esto? La condición en la que estaban Noemí y Rut, era de extrema pobreza, le voy a explicar por qué. Porque al haber muerto el esposo de Noemí, y también el haber muerto el esposo de Rut, no tenían quien las sostuviera. ¿Sabe por qué Rut estaba segando? ¿Estaba detrás, en realidad, de los segadores recogiendo de lo que caía de su mano? Estaba haciendo eso porque era ley en Israel, que los pobres, los desamparados, los que no tenían nada, pudieran recoger espigas que caían de los segadores, a esto en Israel se lo llama leket, es una ley de Dios establecida para el pobre, quiere decir que ¿cuál era la condición de Rut y de Noemí? Pobreza.
Es decir, la gracia no estaba activa porque estaban prósperos, la gracia no estaba activa porque tenían, pero, ¿sabe una cosa? Usted lee el capítulo 1, usted lee el capítulo 2, que acabamos de leer y sigue, y usted no va a encontrar una sola palabra en la Biblia que registre tristeza en las palabras de Rut, no hay una sola palabra de queja, y era una extranjera que, aparentemente, no tenía a Dios, una mujer que en ningún momento dijo, ¿por qué nos está pasando esto? Después que dijo, tu Dios será mi Dios, el Espíritu de Dios hizo algo en ella y dijo, yo quiero salir a espigar, yo tengo que hacer algo, porque la gracia es activa.
Si Dios está conmigo, yo voy a moverme y algo va a ocurrir, y algo va a ocurrir...
Quiere decir, entonces, que no importa en qué circunstancias estés en este momento, sea material, sea física, llámese de dinero, llámese de salud, llámese de lo que tú quieras, lo que te venga en este momento y que digas, ésta es mi situación o lo que estoy experimentando, esa no es tu realidad, si estás en el Pacto de Gracia de Dios, tú eres un bendito o una bendita del Señor y esto no es una palabra para decir de una plataforma, esto es una realidad. La palabra bendito, es una palabra enorme que significa, la fructificación del poder y la multiplicación de Dios dentro de ti para que se manifieste en tu vida cotidiana.
Esa realidad que estás viviendo, como la vivía Rut, no es tu verdad, es una realidad pasajera que Dios quiere que por su gracia activa la puedas transformar, pero Dios no lo puede hacer si tú crees que la gracia es algo pasivo, sólo para orar, dame tu gracia Señor. ¿Sabes qué te va a contestar? Si ya te la di.
En Cristo Jesús está toda la gracia y la verdad, y si tú estás en Cristo, tú estás lleno de la gracia de Dios que es en Cristo Jesús.
Ahí está, así que en la situación que estés ahora, mi amado, en la situación que estés, lo que sea que estás pasando, si realmente tú amas a Cristo, si estás siguiendo a Cristo, tú eres un bendito en cualquier circunstancia y eso de que eres bendito va cambiar tu circunstancia, sí lo va hacer pero no es pasivo, es activo.
¿Estoy siendo claro por el Espíritu esta noche? Eres un bendito o una bendita del Señor en cualquier circunstancia.
2. La Gracia dirige tus pasos.
¿Por qué digo esto? El versículo 3 del capítulo 2 dice:
"Partió, pues, y espigó en el campo en pos de los segadores;
y fue a la parte del campo que pertenecía a Booz,
que era de la familia de Elimelec."
Escuche esto, cuando Rut salió tenía que elegir a dónde iba a espigar. No es que Noemí en algún momento le dijo, mira hija, aquí hay un pariente nuestro directo de mi esposo, porque el esposo de Noemí era Elimelec, por eso dice, que Booz era pariente del esposo de Noemí llamado Elimelec. No.
Rut cuando salió, dígame, ¿quién dirigió sus pasos? La gracia, la gracia la llevó a elegir el campo correcto.
La gracia te lleva a elegir, a decidir las cosas correctas, si confías en la gracia desde que te levantas en la mañana hasta que te acuestas en la noche, todos tus pasos el más mínimo que hagas estará dirigido por el Señor.
No estarás preguntando, ¿estaré guiado? ¡Oh Señor no me permitas equivocar! Estar siempre diciendo, ¡Oh Señor quiero conocer tu voluntad y no me permitas equivocar! Significa, andar en la misericordia, pero significa no activar la gracia, la gracia no pregunta todo el tiempo si estoy correcto.
¡Está correcto porque Dios dirige sus pasos!
¡Dios dirige tus pasos porque vives en la gracia, en la persona que es la gracia misma, que es Jesucristo,
desde que te levantas. Él la guió. ¿La guió el Señor? Claro que la guió, la guió al campo correcto, al campo del pariente de Elimelec, que iba a ser muy importante ese campo, iba a ser muy importante ese hombre para ella, lo vamos a ver un poco más adelante.
3. La Gracia es el ámbito de las sorpresas divinas.
La Gracia es el ámbito de las sorpresas divinas, quiero que leamos el verso 8, por favor:
"Entonces Booz dijo a Rut:
“Oye, hija mía. No vayas a espigar a otro campo;
tampoco pases de aquí, sino quédate con mis criadas.
Fíjate en el campo donde ellas siegan y síguelas,
pues he ordenado a los siervos que no te molesten.
Cuando tengas sed, ve a las vasijas
y bebe del agua que sacan los siervos.”
Ella bajó su rostro, se postró en tierra y le dijo:
“¿Por qué he hallado gracia ante sus ojos para que se fije en mí,
siendo yo extranjera?”
Rut 2: 8-10
¿Qué le pasó a Rut? Estaba sorprendida, ella se preguntó y dijo, ¿por qué esta persona me está tratando con ésta amabilidad? Porque yo, encima, no soy una judía que estoy espigando, no soy un pobre judío, soy una extranjera. O sea, de pobre tengo menos todavía, porque un pobre judío tiene que estar antes que yo haciendo esto que yo estoy haciendo, porque es primero para él o para ella y no para mí.
Dijo, ¿por qué me estás mirando, por qué yo halle gracia siendo una extranjera?
Esto es lo que ocurre cuando tú sabes que Dios dirige tus pasos.
Escúchame bien iglesia, escucha bien al Espíritu de Dios:
Si tú esta noche crees en verdad a esta Palabra, empezarás a ser sorprendido en tu vida cotidiana.
Quiero que escuches lo que el Espíritu te dice...
Comenzarás a ser sorprendido en tu vida cotidiana.
Me mostró el Señor una monotonía diabólica sobre la Iglesia, una monotonía diabólica sobre el estilo de vida de la Iglesia, una monotonía, donde a veces hasta pareciera que Dios estuviera muerto, monotonía en el trabajo, monotonía en la escuela, monotonía en lo que hago y dejo de hacer, una monotonía que no parte de la vida del Reino de Dios.
Pero quiero decirte, que estás en el ámbito donde las sorpresas divinas positivas, porque nunca Dios da nada malo, todo lo que Dios da es bueno, así que no puede ser más que positivas, serán reflejadas en tu vida, serán manifestadas en tu vida porque vas a entrar a algo, que he venido de parte de Dios a decirte, ¡entras, porque entras por la fe!
Y sí que vamos a escuchar, sí que vamos a saber de las cosas que pasaron de la gracia de Dios después de una Palabra que el Señor libera sobre su Iglesia.
Estaba Rut sorprendida, y en estos días pasaron tantas cosas, ¡Ah! ¡Si supieran todas las cosas que nos pasaron! ¿Y sabe una cosa? Comprobé esta Palabra, ¡qué tremenda la gracia! Me sorprendió Dios, me sorprendió Dios esta semana.. esta semana, del lunes a hoy, me sorprendió Dios en todo, en todo, no importa lo que se atraviesa, no importa la circunstancias que atravesamos, les digo, todas fueron vencidas; porque somos muy santos, no, aunque tenemos que ser santos, pero no es por eso, es puramente por la gracia del Señor, la cual creemos y activamos cada día sabiendo que Él nos dirige.
¡No me digas, que no necesitas ser sorprendido por el Señor! Sí, lo creo, sí, lo creo, Dios tiene muchas cosas con las cuales sorprendernos y tenemos que permitir que lo haga, tenemos que liberar lo que obstruye, estorba a liberar esa gracia activa que Dios quiere sobre nosotros.
4. La Gracia es protección.
Quiero que lea conmigo, versículos 11 y 12; y dice así, capítulo 2 versos 11 y 12:
"Booz le respondió:
Es decir, cuando ella dijo, ¿por qué hallé gracia? Mire lo que le responde Booz:
Todo lo que has hecho por tu suegra después de la muerte de tu esposo
me ha sido informado en detalle,
y cómo dejaste a tu padre, a tu madre y tu tierra natal,
y viniste a un pueblo que antes no conocías.
Escuche bien ahora.
Que el Señor recompense tu obra
y que tu pago sea completo de parte del Señor, Dios de Israel,
bajo cuyas alas has venido a refugiarte."
Entonces ella dijo:
“Señor mío, he hallado gracia ante sus ojos, porque me ha consolado...
Me detengo, me detengo, ahora Rut comenzaba a entender aquella sorpresa, es decir, comenzaba a entender, porqué era que Booz le tenía un trato tan especial.
Recuerda que dije, tu pueblo será mi pueblo, tu Dios será mi Dios... y, ¿qué paso? Booz le dijo, yo sé un detalle, yo sé en detalle todo lo que has hecho por tu suegra, Noemí.
¿Sabe qué significa eso? Las acciones de Rut fueron coherentes con su decisión, las acciones de Rut eran acciones de una mujer que había conocido la gracia de Dios y actuaba en consonancia y en acuerdo a la gracia que había recibido.
Es decir, en esa gracia ella estaba actuando con Noemí, como debía actuar, y ¿sabe lo que le dice Booz? ¡Oh hija, tú no sabes algo, tú te has venido a refugiar bajo las alas del Señor!
Por decir, ¿tu pueblo será mi pueblo y tu Dios será mi Dios? Sí, ¡pero éste es el Dios verdadero, esto no es un ídolo, esto no es una imagen, esto no es un fetiche, esto no es una brujería!
¡Éste es el Dios creador del cielo y de la Tierra! ¡Y Él tiene alas en las que te puedes refugiar!
Es más, esta idea de las alas está en todo el Antiguo Testamento, sino, ¿cuántas veces leemos el Salmo 91? ¿Ah? Debajo de sus alas vivirá seguro.
Es más, aún en el Nuevo Testamento, cuando Jesús lloró porque Jerusalén rechazaba al Mesías, Él dijo, cuántas veces quise juntar a tus hijos como la gallina junta a sus polluelos debajo de las alas y no quisiste.
La gracia es protección, pero ¿sabe una cosa? Escuche bien... no se lo diga a Rut para que no se ponga celosa, la gracia que nosotros tenemos en Cristo es mayor que la de ella.
Le voy a explicar por qué es mayor. Primero, porque la Biblia dice que tú y yo estamos escondidos con Cristo en Dios, doble protección, con Cristo, ¿dónde? En Dios, doble.
Segundo, porque dice, que cada uno de nosotros somos parte de su carne, de su cuerpo y de sus huesos.
Eso dice Efesios acerca de cada uno de nosotros.
Escúcheme, cuando alguien te ataca, ataca la carne y los huesos, ¿de quién? De Cristo.
Hermano esto, no se trata de ti se trata de Él.
¿Sabe por qué no activamos la gracia? Porque creemos que se trata de nosotros y nos miramos en nuestra humanidad, en nuestras debilidades y en nuestras fallas; y Dios quiere que saquemos la vista de nuestra humanidad, de nuestras debilidades y nuestras fallas para que las pongamos en el Cristo que nos habita, porque entonces, como un espejo, la gloria del Señor nos va a transformar.
Ese espejo es mirando a Cristo, mirándote a ti mismo nunca vas a poder ser transformado, es mirando a Cristo que esa gloria que se refleja como espejo me transforma de adentro hacia afuera, porque se trata de Él en mí, y no de mí.
¿Estás protegido? Ay... no sé qué me va a pasar en la calle, es que está muy difícil la situación, hay mucha inseguridad, tenemos este problema, aquel problema... Ay, no sé qué me pueda ocurrir... Mejor ten más cuidado.
Hermano, hermana, hermano, hermana... así... ¿usted cree que así activamos la gracia? ¿Bajo un espíritu de temor? Pero sabe una cosa, ¿Sabe una cosa? La Iglesia está llena de un espíritu de temor.
Le voy a poner un ejemplo, ¿sabe por qué gran parte de la Iglesia, cuándo ve los eventos que están ocurriendo empieza a preguntar, el Señor viene... el Señor viene... sabe por qué se pregunta eso? Porque se quiere escapar de miedo que tiene porque no quiere sufrir lo que viene, ¿usted cree que eso es caminar en la gracia? ¿Usted cree que Dios va a quitar de aquí un pueblo temeroso? No, usted está mal informado.
¡Dios va a quitar de aquí un pueblo que sufra la tribulación y venza, aunque le cueste la carne y la sangre, esos son los que vencen!
¡Eso es lo que dice Apocalipsis, los mártires que están ahí!
Aunque tuvieron que sufrirlo, no dijeron, escapémonos, ¿ah? Doctrina escapista, escapémonos antes de sufrir, no, no. La Iglesia de Cristo no tiene ese temor. Pero cuando veo tanta Iglesia bajo ese temor digo, ¿Señor, dónde ha quedado tu gracia en tus hijos? ¿Dónde ha quedado? ¿Qué pasa que no podemos activar esa gracia de Dios de una manera poderosa, de una manera nueva, de una manera diferente, en el Nombre de Jesús? Es tiempo de activarla.
Quinto, esto es demasiado importante, este quinto punto es demasiado importante.
5. La Gracia es propiedad del humilde.
Yo no estoy diciendo que la gracia está sobre el humilde, si usted escuchó bien mis palabras, yo dije que la gracia es una propiedad, algo que toma el humilde como si le perteneciera.
¿Por qué digo yo que la gracia es propiedad del humilde?
Miren, la respuesta que Rut le da a Booz muestra que ella tenía la humildad como propiedad. Versículo 13 por favor, del capítulo 2, dice así, después que Booz le dijo que ella se refugió bajo las alas del Señor, ella le dijo, Señor...
"... he hallado gracia ante sus ojos, porque me ha consolado
y en verdad ha hablado con bondad a su sierva,
Escuche bien ahora, aunque yo no soy... aunque yo no soy ni como una de sus criadas.”
¿Estaba clara quién era ella? Sí.
Primero dijo, ¿por qué me mira a mí si soy extranjera? Primero. Luego le dice, como soy extranjera ni siquiera... ni siquiera dice, como soy extranjera, ni siquiera soy como una de tus criadas que trabajan en tu campo. ¿Lo está viendo? ¿Lo está viendo?
Escuche, no se trataba de que la gracia estaba sobre Rut, porque Rut simplemente trataba o intentaba ser humilde. No, era humilde de corazón, la humildad en ella era una propiedad, no era algo que decía, debo imponerme ser humilde porque me parece que no estoy siendo humilde.
El que todavía cree que no es humilde es que todavía no ha hecho de la humildad su propiedad, por eso, tiene problemas con la humildad.
Siempre digo esta frase yo, cuando usted ve que alguien se desubica, usted dice, ¿qué desubicado, no? Cómo se desubicó. ¿Sabe por qué uno se desubica? Por falta de humildad.
Cuando hay falta de humildad en algo, siempre me voy a desubicar, la humildad me ubica, la humildad fue la unción más importante de Jesucristo, por la cual, todas las otras unciones fueron liberadas en Él. Dijo, aprendan de mí, que soy... no dijo: tengo. Soy... soy humilde.
Mire esto, vaya a Proverbios, por favor, Proverbios capítulo 3, Proverbios en su capítulo 3, el verso 34; voy a leer desde el 33 para un poco de contexto que dice:
La maldición del Señor está en la casa del impío,
Pero bendecirá la morada de los justos.
Ciertamente él escarnecerá a los escarnecedores,
Y a los humildes dará gracia."
Proverbios 3: 33-34
A los que son humildes, dará gracia.
Santiago, capítulo 4, Santiago capítulo 4 versículo 6, dice:
"Pero él da mayor gracia.
Por esto dice:
Dios resiste a los soberbios, y da gracia a los humildes."
Santiago 4:6
1 Pedro capítulo 5 versículo 5, 1 Pedro capítulo 5 versículo 5, dice:
"Igualmente, jóvenes, estad sujetos a los ancianos;
y todos, sumisos unos a otros,
revestíos de humildad; porque:
Dios resiste a los soberbios, Y da gracia a los humildes."
1 Pedro 5:5
Mi hermano, muchas veces la gracia de Dios no ha sido manifestada en la dimensión que Dios desea porque ha habido orgullo, porque ha habido soberbia, y probablemente digas, bueno no lo he visto en todas las áreas, pero con que esté en una ahí está.
Un humilde, es decir, uno que tiene la humildad como propiedad, no tiene orgullo en ningún área, no es que hay algún área que queda fuera de esa humildad con la cual él es propietario, no puede suceder eso es imposible que suceda.
Si es humilde no hay áreas de orgullo, si tiene áreas de orgullo cualquiera sea, cualquiera sea, no es humilde.
No es que, en esta área me falta humildad. No, lo que te falta es humildad, literal, lo que falta es llegar a alcanzar ser humilde y que aprendamos de Jesús, aprendamos, dijo, que lo aprendamos, ¡eh! Dijo, que lo aprendamos, aprendan de Mí que soy manso y humilde de corazón. Se aprende la humildad.
Por eso, hay muchos procesos que la Iglesia ha vivido y que tú has vivido como hijo de Dios, ¿sabes para qué son esos procesos? Para aprender humildad, pero a veces, no entendimos que esos procesos eran para entender humildad.
Cualquier área que esté fuera de esta humildad va a manifestar orgullo, y cuando el orgullo se manifieste, inmediatamente Dios resiste. Dios resiste, inmediatamente, Dios resiste porque la gracia fluye solamente en los humildes.
Por eso, le dije, que éste es uno de los puntos más importantes de los siete puntos que hoy estamos tocando.
La gracia es propiedad de la persona que es humilde.
Y recuerde que humildad no tiene que ver con ser pobre, ¡ay, es de condición humilde! Con eso queremos decir que no tiene recursos o que es pobre; no estamos hablando de esa clase de humildad, estamos hablando de humildad de corazón, de humildad de espíritu, de la humildad real de la que cuenta para Dios, de la que vale para Dios, de la interior donde, ¿sabe qué? me reconozco un completo incapaz.
¿Sabe una cosa? Jesús dijo hace mucho tiempo, sin mí ustedes no pueden hacer absolutamente nada, pero la realidad de los cristianos es que, creemos en la práctica que hay algunas cosas que sí podemos hacer sin Jesús.
Cuando seas un completo incapaz y te digas, eres un bueno para nada, ¡bendice a Dios! ¡Gracias Señor que soy un bueno para nada! ¿Cómo? Sí, gracias que soy un bueno para nada, ¿sabe por qué? Porque eso es en realidad una bendita incapacidad, porque cuando nos reconocemos completamente incapaces sin Jesús, es entonces cuando lo seremos todo en Jesús, donde nada nos podrá detener y donde la gracia de Dios fluirá cómo un río imposible de detener sobre la faz de la Tierra.
Recuerde, la gracia es propiedad del humilde.
6. La Gracia te prospera.
¿Por qué digo la gracia te prospera? Porque todo lo que leemos a partir del versículo 14, son una serie de indicaciones que Booz le da a sus criados, y les dice, bueno de aquí en adelante, por favor, no sólo la dejan espigar, por favor, que se les caiga más de las manos. ¿Cómo? Sí, sí que se le caiga "p'aquí", que se les caiga más de las manos, déjela, y por favor, nadie me la molesta, y nadie me la reprende.
Es más, ahora va a venir a descansar y cuándo venga a descansar ella, viene con las criadas, como si fuera una de mis trabajadoras, y llama él y le dijo, ven aquí, ven aquí toma tu pan y mójalo en el vinagre aquí conmigo, y le dio tanto de comer que le sobró, y ¿qué hizo ella? Lo guardó ¿para quién? para su suegra…
Tu pueblo será mi pueblo, tu Dios será mí Dios...
Coherente, no se puede ser incoherente con la gracia, recibo la gracia y trato a los demás en absoluta desgracia con la punta del pie, no puede ser, ¿no? No, no puede ser.
Es más, dice ahí, que ese día se fue a casa con 22 litros de cebada en la espalda, ¿sabe una cosa? Yo creo que nosotros tenemos mal categorizadas a las mujeres. La Biblia dice que la mujer es vaso frágil no dice, que es vaso débil, nosotros confundimos fragilidad con debilidad.
Le voy a poner un ejemplo, si yo ahora me quiero tomar un café bien caliente, ¿usted dónde me lo da, en qué me lo da? En una taza; hay de cerámica y hay de porcelana fina, ¿si cualquiera de las dos se me cae de las manos, qué ocurre? Se me rompe, ¿por qué? Es frágil. Pero el hecho de que soporte lo caliente del café demuestra que no es débil, ¡ah, alguna mujer dijo, Gloria a Dios! ¡Ay dijo la otra, ahora me van a hacer trabajar más! ¿22 kilos a la espalda después de trabajar todo el día? Ay no, que me duele, es que tengo un problema en.. No, ¿no? No, ¿no?
Y cuando llega de su suegra, imagínese, ¿qué pasó aquí? Me trae comida, trae esta cantidad de cebada, 22 litros es muchísima cebada, ¿qué pasó aquí?
Hermano escuche, no es tu esfuerzo, no es tu trabajo, no es tu empleo, no es tu capacidad, no es tu inteligencia, es la gracia, es la gracia, si tú honras a la gracia honras a Cristo, porque en Él está manifestada la gracia y la verdad. La gracia de Dios te prospera.
Séptimo, la gracia de Dios hace algo muy especial:
7. La Gracia hace manifiesta la redención.
Y ahora voy a explicar, ¿por qué hablo de redención? Porque cuando llegó Rut con la comida y llegó con los 22 litros de cebada, le dice, ¿dónde? ¿Dónde fuiste a espigar? ¿Qué pasó? Y le dice, ¡ah! De cierto que fui al campo de un señor llamado Booz... ¿cómo? Pero escúchame Rut, ése es nuestro pariente; al campo que fuiste es aquél que te puede redimir, es decir, es aquél que te puede quitar de tu viudez y darte descendencia.
¡Fuiste a parar al campo de tu redentor, de tu redentor! ¡La gracia te llevó al campo de tu redentor!
¡Gloria al Señor!
Escúcheme, en la redención, cuando Dios nos compró, ahí está la salvación completa, la salud completa de nuestro espíritu, de nuestra alma, de nuestro cuerpo, la prosperidad, la liberación, toda clase de salud, toda clase de bien está en la redención.
Pero escúcheme, si la gracia no está activa yo no soy llevado a que la redención esté activa, tengo una redención de estudio bíblico, tengo una redención donde estudio salud, sanidad interior, liberación de ataduras, del ocultismo, que Dios me prospera, que me ha hecho nueva persona, tengo una gracia de Instituto Bíblico, tengo una gracia de estudio, de mensaje y de predicación, pero no estoy activo en la gracia que todo el tiempo me conduce a Cristo, mi redentor.
¡Wow! Mire hermano, cuando vi esto dije, ¡oh Señor Jesús! ¡Oh Señor Jesús!
Hoy, que vas a empezar a liberar esto sobre tu Iglesia, tu Iglesia va a empezar a ver tu liberación, de tal manera, escuche lo que le digo por el Espíritu:
Verá como nunca antes en el pueblo de Dios sanidades y milagros sobre sus cuerpos, sobre sus espíritus, sus almas, pero no porque algún predicador las ministre...
Escúcheme no será por eso, será porque usted entró a otra cosa con Dios, usted le está creyendo otra cosa a Dios, y Dios lo está haciendo en usted para que el que se lleve la gloria sea el Señor.
No una campaña, ni un ministerio, ni un predicador. ¿Lo está viendo?
¿Qué fue específicamente lo que me dijo el Señor?
El Señor me mostró que ha venido sobre el mundo y específicamente sobre la Iglesia, una clase de esclavitud y esta clase de esclavitud, me mostró el Señor, que irá creciendo, ésta no es una esclavitud como en la antigüedad, es una esclavitud que llamamos laboral.
En esa esclavitud laboral usted cada vez tendrá que trabajar más para obtener el mismo salario o menos, prácticamente, el diablo ha levantado una plataforma para que toda su vida y todas sus horas del día estén entregadas a un trabajo para poder mantener a su familia y usted con el temor de decir, yo no puedo decir a esto que no, porque si yo digo que no, realmente, ¿de qué vamos a vivir? Y realmente, ni a los gerentes, ni a los directivos, a nadie le va interesar si usted trabaja 25 de las 24 horas del día, no le va a interesar, cada vez esto va a ser mayor, ni siquiera los departamentos de Recursos Humanos y todos los que están para el bienestar, no servirá.
Escúcheme, cada vez es peor y seguirá siendo peor…
Y el Señor me habló:
Necesitamos liberar a mi pueblo de esa esclavitud.
Mi pueblo no puede estar como los de afuera en la misma esclavitud, porque mi pueblo no puede ser cancelado y vivir para trabajar y mantener a su familia, porque entonces, significaría que los medios económicos que mi pueblo tendría para mantenerse viene de su esfuerzo y su trabajo y no de mí.
Por lo tanto, lo que Dios me indicó hacer, es liberar al pueblo de Dios esta noche, de esa esclavitud.
¡Bendito sea el Señor! Eso es, por lo cual, estoy esta noche en este lugar.
Y será peor, y usted, escúcheme bien, será desafiado a tomar decisiones difíciles que le van a costar, económicamente hablando, o le van a costar en seguridad, entre comillas, pero usted las tendrá que tomar, ¿y sabe qué va a pasar? Acuérdese de Rut, la gracia de Dios la guía a su redentor. ¡Uh!
Específicamente por esto, vamos a orar esta noche. Por eso le dije desde el principio, va a ser muy sencillo y claro que vamos a traer de parte de Dios, y se va a estar cumpliendo lo que dice Hechos 4:33, que quiero que lo leamos, por favor, sobre nosotros como Iglesia, remarque este versículo, dice así, Hechos 4:33:
"Y con gran poder los apóstoles daban testimonio
de la resurrección del Señor Jesús,
y abundante gracia era sobre todos ellos."
No era gracia, ¿era?... abundante gracia era sobre todos ellos.
A partir de éste día lo profetizo en el Nombre del Señor:
Abundante gracia se manifestará sobre la Iglesia de Jesucristo en el mundo, los que nos escuchan y los que no nos escuchan, pero los que son verdadera Iglesia percibirán en su espíritu que hay una abundante gracia de Dios que llega a sus vidas en un momento clave, en un momento decisivo de la vida de la Iglesia y de los últimos tiempos.
¡Bendito sea el Señor! Vamos a estar ahora de pie, tanto aquí, como allá en los lugares dónde están recibiendo la transmisión, porque por esto específicamente, vino esta Palabra este día, y por esto es que vamos a orar.
Creo que el Espíritu Santo, hoy ha sido muy claro con nosotros, no ha traído nada complicado el Espíritu Santo, ha traído algo bien práctico, algo para creer y vivirlo, ¿amén? ¿Está listo? ¿Está lista? ¿Allí en la transmisión? Hasta los escucho decir, ¡amén!
Amén, vamos a alzar nuestras manos amados.
Padre, gracias que hoy estamos aquí por toda tu Iglesia, nosotros somos un grupo de gente dentro de tu Iglesia, tu Iglesia es muy grande, enorme. Tú tienes tienes millones, aún en los lugares asiáticos y en otras partes del mundo. Pero yo sé hoy Señor, que por la Palabra que me ordenaste liberar por tu Espíritu Santo, aún sobre aquellos que hay persecución vendrán cosas sobrenaturales de la gracia del Señor.
Y vengo específicamente, como tu Espíritu me lo mostró, para destruir sobre la Iglesia, la plataforma y la maquinaria que el diablo levantó para oprimir al pueblo con una nueva clase de esclavitud que se llama esclavitud laboral, para realmente empobrecerlo, tenerlo todo el tiempo entregando la vida allí ya agotando la fuerza de tus hijos.
Yo reprendo esa maquinaria, la destruyo en el Nombre de Jesús.
Y declaro ahora, que todos tus hijos en todo lugar, en toda nación, salen, salen, salen de esa opresión, son librados, la gracia activa en ellos los liberta. Estos hijos tiene fe para tomar decisiones, para decir hasta aquí, yo no dependo de un empleo, yo dependo de mi Señor. Y hasta ahora se han agotado mis fuerzas y me he sentido mal ante el Espíritu porque ni tiempo he tenido en mi comunión con Dios, voy a romper esto sobre mí y sobre mi casa y voy a tomar decisiones radicales para Dios.
Sí Señor, en todo lugar, esto va a ocurrir, y entonces, veremos negocios de los hermanos, ideas productivas y nuevas que ellos tendrán y prosperarán, prosperarán, prosperarán, prosperarán, prosperarán, prosperaran... no porque sea el gran producto sino porque la gracia de Dios está con ellos.
Señor gracias, por lo que hoy estamos recibiendo de tu Espíritu, esto es tuyo completamente, y todos, y el que habla, lo reciben de ti.
Todos lo recibimos, sabiendo que tu Espíritu está hablando, y que hoy realmente saldremos de aquí en una dimensión de gracia que hasta ahora desconocíamos en la experiencia, aunque la podíamos conocer en el texto, pero no en la experiencia.
Por eso Señor, gracias te damos, vamos a experimentarla, y escucharemos las maravillas de Dios hechas en un pueblo que te cree, que tiene unidad de Espíritu.
Aleluya Señor, Aleluya Señor.
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